domingo, 22 de enero de 2012

Me quedé en el umbral mirándolo. Estaba arrodillado en el suelo sobre la colorida alfombra de su habitación alumbrado solamente por la luz del atardecer a través de su ventana. Estaba murmurando algo. No supe a qué o a quién hasta que se dio la vuelta. Me escondí para que no me viera, pero traté de escuchar con atención lo que decía. Hablaba con su muñeco. Sí uno de esos muñecos que les gustan a los niños que tienen el doble de masa muscular que alguien normal de este mundo. Uno de esos totalmente flexible… ¿Action Man puede ser? No sé. Empezó a hablar algo más alto, y entonces pude entenderle.  

“Cuando sea mayor seré como tú. Salvaré el mundo. Porque… Tú eres el hombre más fuerte del mundo, ¿no? Tienes más músculos que nadie y además eres muy listo. El más listo también. Irás a disparar las metralletas a la guerra como hacía el abuelo ¿verdad? Y luego volverás curado y feliz porque habrás ganado, ¿a que sí? Pues yo haré lo mismo. Pim pam pum. Mataré al malo. Y me darán mucho dinero. Seré el más rico del mundo y, y, y… Entonces me casaré con Laura. Porque como seré un héroe ella entonces me verá y me querrá. Me compraré un coche como el de papá y comeremos perdices y viviremos felices. Aunque... no sé ni que es eso... ¿Tú sabes lo que es "perdices"?...”


     Volví a incorporarme y no supe si reír o llorar.         


Perdón por la espera.
Si es que alguien ha estado esperando.
<3 

5 comentarios:

Unknown dijo...

Que disfrute de esa ingenuidad hasta que se le consuma. Que es lo mejor que se puede tener.

Lucia's Box dijo...

¡Esperaba impaciente otra entrada tuya!
Ríe.seguramente sea pasajero,ya se le quitarán las ganas.¿no?Y si no se le quitan,por lo menos sabe lo que quiere,lo tiene claro,que es mucho más de lo que mucha gente puede decir.

Ginebra dijo...

Vaya! Yo también tengo la duda de si sería más acertado reír o llorar. Impactante, como siempre :)
Un guiño desde:
http://lo-que-perdi-en-el-desvan.blogspot.com/

Javier Copado dijo...

Siempre alguien espera no lo dudes :D
Reir por la ingenuidad de un niño, llorar por las intenciones que les enseñamos y que nos enseñan también a nosotros...

- dijo...

¡Llevaba esperando esta entrada mucho tiempo! ¡Leí unas pocas lineas hace tiempo desde mi escritorio de blogger, pero, cuando entraba en tu blog, estaba borrado! >_<
Si, tienes razón. Tú cuando escribes eres como un claro bombardeo. Pero es lo que me gusta de tus textos. Transmiten energía, transmiten tus sentimientos en dosis demasiado grandes. Es algo que admiro mucho, porque yo no sé hacer llegar los sentimientos de esa forma.

<3